Cocinar sin gluten en una casa donde conviven personas celiacas y no celiacas puede ser una odisea. Sobre todo si es desde hace poco y no se tiene por la mano. Muchas veces hacemos cosas sin darnos cuenta que pueden afectar a la persona celiaca y que es conveniente evitar.
Por eso, en este post, te dejamos algunos consejos que he ido aprendiendo con el tiempo y que seguro te puede ayudar. Evitar la contaminación cruzada en la cocina es esencial para que comer en casa sea algo seguro.
- Tener un cajón especial para la comida sin gluten: aunque parezca que la cocina es enana, seguro que hay algún cajón o estantería que se puede utilizar para las cosas especiales sin gluten. Así, se evita el contacto con otros alimentos que pueden llevar gluten y, si vamos a ese cajón es porque vamos a cocinar sin gluten, por tanto tenemos más conciencia de lo que estamos cocinando. También va muy bien para la persona celiaca, sabe perfectamente donde están sus alimentos, y donde recurrir.
- Tostadora o sandwichera sin gluten: es uno de los sitios donde más gluten se acumula ya que en las tostadoras se tuesta pan (que cosas…) es decir, fuente de gluten por excelencia. Además, estos electrodomésticos son normalmente difíciles de limpiar a conciencia y por tanto, es fácil que queden migas de pan. Tener una tostadora solo para el pan sin gluten, es garantía de calidad.
- No mezclar utensilios: si haces la comida con gluten y sin gluten a la vez, los utensilios que utilices para cada uno no se pueden ni ver! Una cuchara para la comida sin gluten y otra para la que tiene gluten. Dejarla en sitios diferentes y si puede ser utilizar utensilios de metal o plástico antes que de madera. Se limpian mejor y no dejan partículas. Si en algún momento has perdido el hilo y no sabes cual es cual, lo mejor escoger otro cubierto o lavarlo. Mejor no arriesgarse.
- El horno siempre limpio: a la hora de utilizar el horno es imprescindible que esté limpio. Además, no vale poner cosas con gluten y sin gluten a la vez para ahorrar tiempo. Siempre hay que hacer primero lo que es sin gluten y luego el resto de cosas. Aunque a veces sea un rollo porque la comida sin gluten esté hecha más rato, no se puede mezclar.
- El aceite, ese gran misterio: pero si esto no lleva gluten… ¿Con que aceite lo has hecho? El aceite es siempre un gran olvidado. Aunque la comida sea 100% sin gluten, si lo fríes en el mismo aceite que unas croquetas… ya la hemos cagado. Por eso, si no sabes que has hecho con él antes, mejor coger nuevo. ¡Siempre! Y aunque esto esté bien asentado en casa, es importante dejarlo claro cuando vas a casa de alguien.
Os dejamos aquí el post de Instagram donde hemos preparado una infografía bastante sencilla.
¿Tenéis algún truquito en la cocina para que la contaminación cruzada no sea un problema?